Jorge Diaz K.LLA—fEn la otcuridad y con una vol susutraute.) Ah, dame U nano. No re veo. Tengo miedo. 6l—(Con la misma voz.) >P6nde estas? ELLA—Tal vez encendiendo un fosforo. hi.—'Sf, los cidos de nuestro ultimo velatorio. Ella—Se podria intentar... iAmba endenden unaterilluyprenden as vehis de dos candelabros tnortuorios que antes no te habian visto en 'I eseenano, pero que ahora estdn en el such. El cscenario desnudo ie ve. i la debil y parpadeamc im de lot tinos. Bl.h\ toma elarpa que sc habia 'isto durante la obra en tin rincon y EL un largo tejido incontiuso. Con •I en las manas se sienta en la mecedora. Ella empieza a toear el arpa. nterpreta el «leitmotiv» de la obra, el sugerentc y reiterative tenia del iovivo del parque. de atractiones. El, tin pizca de inhibition ni de. burla, e pone a tejer, meciendose. Ambos sonnen beatifkamente. Hit.a sin de jar k tocar el arpa.) jH.l dia ha sido maravilloso! El-S(, pero ya no queda nada de nuestro parque de atracciones. EllA—Solamente hasta manana en que inventaremos orro. £[.—Cada dia es una maravülosa caja de sorpresas con premios, un *rgo tüne] del amor. H.i.i a—En realidad... ;como podrcmos sobreVivir? £l—qu£> Ella-A este carirto tremendo. £».—;Somos fuertes! E ILA - j 1 n v ul nerab les! fit.-[Inseparables! E LLA—; I luolcrablcs! fci.-jln-tolera-bles!... A M BOS—; In - to - k - ra -bka! (Las cottinas se cierran mientras El sigue tcjiendo y tnctiendoic y ::>a sigue tocundo e! arpa.) Emilio Cardaliii>o (Mexico, 1925) Emilio Carballido nacio en Cordoba, Veracruz, en 1925. Se formö en la capital cuando su mad re lo llcvo alii muy joven, pero pasö un afto con su padre en Veracruz en 1939 lo cual le dejö jmpresiones profundas de la vida provincial, la sehra y el mar. Celestino Gorostiza y Salvador Novo inrluyen en su decision de escribir teatro; Carlos Ptllicer y Agustin Yahe/ son sus maestros en la secundaria y la preparatoria, respect ivamente. Estudia en la UNAM y comienza a Vitrenar y publkar piezas teatrales en 1948. El ano 195« es clave ya que nacc su bijo Jüan de Dins, y cslrena en el Pal ado de Bellas Aries. L>urantc su larga carrera ha escriro mas de 3U ob ras com pie las, mäs de 60 obras corras, varias obras narrativas y muchos guiones cinematogrä-ficos. Entre su produccion dramatica flguran Optras y piezas infantiles. A pesar de haber desempeiiado varios puts tos docentes (fcscuela de Arte Dramatic" del I NBA, el lnstituto Politecnico de Mexico y la UN AM) administratives, doc umen tales y editoriales (en 1975 fundö la revista teatral Tramoya que se sigue publicando en colaboracidn con Rutgers University cn Estados Uni dos}, siempre se ha dedicado al teatro. Ha sido invitado a muchos paises, y ha dado clases en las uiuversidades dc Rutgers, Pittsburgh y California. En 1977 renuncio a todas sus actividades administratives para dedicarse a tiempo completo a la escritura. No es simplemente por ser un autor prolifico que ha akanzado fama internacional, sino por la calidad estctica y trascenden-fal de sus obras. Su espirilu creador lo ha llevado hacia formas innovadoras, mas allä de una orientacion cxclusivamente nacional, en su investigaeiön de los problemas psicolo^icos, ontolögicos y aim politicos del hombre conternporäneo. Sobra decir que Carballido es el dramaturge mexicano mas ccmocido y consaijrado de Mexico de la Sekunda mitad del siglo XX. La critica desde muy temprano ha seiialado dos tendencias fundamentales en la obra dramatica de Carballido —la realista y la fantastic a— y la tendencia a combinar las dos. Rosalba y los Ihivcros •:. )9ü0), su primera obra de imporlancia, profundi/a en el contrasfe psicologico entre una joven melropolitana y sus primos piovincianos, comentando las inhibiciones sexuales y morales de estos, mientras El dia que se soltaron los leones (1963) expone los conflictos constanlcs entre la represiön y la libertad. La danza que tuena la tortuga (1954) es 96 E m i 11 o C a r b a 11 i d o otra obra de provincias que sigue con la misma temática c n su reti» de la voledad y las frustracioncs de dos solteronas. Felkiáad i 1955) i uiu obra de lítultj ironico y tono amargo. Este cklo cuimina con hebra de oro (1955), obra que mezcla lo real y lo fantástico en i figura mági ľ a y simbolica. El Hombre vuelve al mundo real de su$ v«, abuelas para darles la capacidad de reconocer sus problemas tni profundos. En los dítt an os entre La hebra de oro y Ya también hablo de « rosa, la obra presentada en est a colección. Carballido experimenta con varias formas y técnicas. En Medusa (1962) y Testo (1962), el autoc re interpreta los mitos clásicos, dándoles u n toque original y existent cialista. En los mismos a nos, escribe Un pcqueňodía de ira (1962), obra í que sin cacr rti en lo didáctico ni lo melodramático c ritka cl ambiente • politico. También escribe varias farsas como -Silencio, polhí petones, ya Žc.T van a echar su maiz! {i 963) y Tejuro, Juana, que tengo gama (1965), la primera un cuadro politico de la vida mexicana con toda su buro-cracia y s u hipocresía, la segunda u n retrato cómico y algo burlesco de las experiencias amorosas de un joven con una m u jer madura. A pa rti r de Yo también hablo de hi rosa (1965), Carballido muestra en su ereación dramátka aún más variedad dc icma y forma. En el Mmanaque de Juarez {19681, el dramaturgo adapta la técnica brechtia-na en su recreation y reexamination dc la história mexicana. El mensaie politico-social de la obra surge de su toi neiden c ia con la ma sac re de Tlatclolco. Carballido trasciende los Ii mites temporales y nationales en Conversation entre las ruinas (1969), una pieza que sigue patrones míticos en el retrato de las vi das ťracasadas de dos a m antes. Hn el mismo aňo escribe Acapulco, los fanes, farsa en un acto que desmitifita sin piedad el «par also» acapulqueňo dc los que se quedan cuando los turistas K van. En 1974 Carballido vuelve momcnlánea-mente a la mezda de realidad y fantasia con su comedia las cartas de Mozart basada en una noche mágka de opera en im Mexico decimo-nönico. Fn Un vah sin fin sobre et planétu (1970) y Fotograßa en la playo (1977), se presents n retratos familiäres en los cuales se entreeru-/an en una gran telarafia las vidas de sus mieinbros. Jose Guadalupe (1976) sigue las líneas artaudianas en su aspecto visual espectacular. En 1977, eseribió Sabui Ollin que es parte de una ereación colectiva h echa con César Rengifo (Venezuela), Osvaldo Dragún (Argentina) y Enrique Buenaventura (Colombia). A Carballido le gusta ubi car sus pie2as en u n ambiente decimo-nónko como es el caso de Las cartas de Mozart (1974), obra inspirada en una noebe de opera cuando se mezcla n la realidad y la fantasia con Y o también hablo de la rosa 97 una história dc amor, las verdaderas canas de Mozart y un ambiente social t]ue ctmibe 'as awnturas de una joven atraída fisicamente a un mendigo desiartalado. Tiempo de ladrones: La história de Chucho el rota (1984) . en una experiencia de teatro total, representa uno de los experiments más ambiciosos de Carballido: un «folletin dramatico» en dos tandas con u n reparto enorme y algunas escenas «a sortear» sobre la vida de este « Robin Hood» que roba a los ricos para ayndar a Jos pobres. Además de las injustkias socio-económtcas que la obra expone, se nota en clla otra de las constantes en las obra* de Carballido, el poder infinite» del individuo a realizarse, transformándosc y transformando su mundo por un camino de action positiva y de sensi-bilidad art isti ca. Otro factor cortstante en la dramaturgia carballidiana es el senlido del humor que está presente ami cuando tratan aspectos seriös de la vida. Este se percibe especialmente en Orhioco (1982), picza que despliega una naturálna amenazante por medio dc un barco al garete en el rio. En él van dos coristas (o prostitutas) que rcpreseman diferentes actitudes frente a su situation desesperada. Otra obra enormementc exitosa, y especialmente graciosa, es Rosa de dos aromas (1985) , en la que Carballido presents de nuevo su conception de la rosa al jugar con los conceptos tradicionales del machismo mexicano, vistos en las attitudes desaflantes de dos mujeres cuando descubren por casualidad su relación con el mismo hombre y cuando urden sus planes de vengarse. En El mar y sus misterios (1988) el mar funciona como protagonista. Fn los aňos 90 Carballido sigue escribiendo con la misma energia y vitalidad de siempre. En Tejer la Ronda (1990) Carballido presenta a cinco mujeres f Lola, Lila. Lala, Lulú, Lilí) y a cinco hombres (Chon, Chuy, Chac, Cha s, Ché) involucrados en j u egos amorosos y sexuales; Las bodas de San Isidro (1991) es un sainete a partir de tradiciones y k-yendas querelanas de lo» siglos XVI al XIX. Uscrno en ei (uerpo de la noche (1990 examina la relación de un adolescente con una mujer mayor dentro dc una situáciou familiar; Los esclavos de Estambul (1991) dramatiza aspectos del poder y liber tad por medio de dos jóvenes (esclavos) traídos a Mexico donde ellos fascinan a la gome local. Engario atlorida con títeres í 1995) conmemora la vida de la ilustro poctisa mexicana Sor Juana Ines do la Cruz en el aniversario de su muertc (1695). Vicente y Rantona (1996) es otra pieza historka. No es posible comentar aqui las numerosas piezas cortas de Carballido pero basta deeir que incorporan las mismas técnicas y las mismas inquiotudes de las obras complelas. Buen e;empl<5 es «El 98 E m i I i o C a r b a 111 d o Yd también bablo de la rosa 99 censo», una obra breve Hena de un humor situational y lingüisticoque cd menta sobre la corriipción gubernám en tál. I.as obras incluidas en varias vers ion es de DF crítican, casi siempre con humor, las situation** ndiculds o grotescas del ambiente capital in o. Carballido nun c a esquiva sus obligaciones com» esc ri tor conocido a n i vel internacionál para exponcr los vicios de la sociedad. Utra de las obligaciones que siempre ha reconocido ešte escritor es la de fonientar d Leatrn mexicano en todassus dimensi ones. Además de ser escritor protífko, de ha ber publicado, estrenado y traducido en los diferentes áinbitos teal rales del mundo, es el «päd re adopt ivo» de toda una generation de escritores jövcnes. Después de haber sido $u profesor en clases del IPN y la U NAM, ha hecho pro moci ó n de sus obras cn cuatro tomos que han aparccido con variaci o nes en el título de i tuno joven dc Mexico. Es una generación que por razones eco-nómicas, polit icas y cult ura les en Mexico, se vit) menos privilegiada en publica r y est reu ar que la suya. I z generación de Carballido, que abarcaba talcs ftgurascomo Luisa losefina Hernandez, üergio Magana y Fedcrico KS. I netán, se aprovechó de con die to nes más favorables al lan/ar sus carreras en los aňos 50. La obra de es t a antológia, Yo también habt» Je la rosa, se ha montado con gran ťreeuencia desde su estreno en 1966. El éxito dc la pie za se debe en parte a la integraci ó n tan perfecta dc tem a y récnica. Carballido comienza con una situación concrela. pero al incorporarla en un contexto metaŕórico logra profund izar en las co mpl ej i da des de la experiencia h u m an a. La obra es, en cierto sentido, una dramatizácie') n del proceso ereativo y. por ende, una negación de los si sic mas que limitan tal proceso. Kl numero de interpretáciu nes diferentes del incidente central sugiere las maneras infiniias de concebir la realidad. Según Carballido, la realidad es, com o la rosa, «un conjunto de ficciones milagrosas... sin posihilidad alguna de explkación*. La figura enigmatic a de La fntermediaria ha provocado muchosestudios eríticos (ver bibliografia) sobre esta obra que, como otras muchas de Carballido, capla elementos de la ailtura popular dentro de un ambiente metropoli ta no en u n diálogo netamente típico del Mexico actual. Además, la interaction consiante entre los elementos i n ex pli cab les y fantást kos con otros de una realidad contundente real za iniestra conciencia de la vision del mundo que lleva, y que sigue creandcs Carballido. En 1995, al cumplir 70 aňos de vida y a 45 aňos del estreno de Rosalba y los Uaveros, se llevaron a cabo en Mexico muchos homenajes a Carballido por sus aporres extraordittarios en pro del teatro mexica-no. Sigue si en do el teatrero in fati gable, totalmente dedicado a fomentar el teatro, donde sea posible. Es un viajero constante, participando en ffStivalcs y simposios de teatro, tanlo nacionalcs como internac ion ales. Su imprimatur sobre el teatro mexicano de la segunda mitad del siglo XX consta sobre todo de tma dedicación a la estética en todas sus diraensiones, a la experimentación, a la originalidad y la intepretación de la realidad que con oce, urban a y provinci an a, para un publico mexicano e internacionál. Ha podido alcanzar estos niveles por s u propia cuenta mientras al mismo tiempo ha esrado respaldando las carreras de u n grupo amplio de escritores jóvenes. Fs, sin lugar a d u das, u no dc los dramaturgos latinoamericanos más lalentosos y [uslamente reconocidos por la comunidad internacionál. George Woodyarp l/n j vers iry of Kansas Emilio Carballido YO TAMBIÉN HABLO DE LA ROSA (Loa) Paia Yolanda GuiHomári, actriz. ľorquc dio vida y amor a Tona y a esla obra. Porque dio vida y amor a muchas obras. Porque dio Vida y Amor. Pero mi rosa no es la rosa fría... Xav]kr Vi l lau r rut i a Amago de la humana arquilecrura.,, Sou Ju am a Inés m: i.A Cruz Esta obra ruf: rstrenada el día 16 de abhil de 1966 en el Teatro |lMÍNE7 rueda, de la c1udad de mexico, con el SJOĽIliK'ľť Reparto La Intermediaria ToŇA Í14 aňos) Poi.o (l2 aňos) Maxim iso González P" Profesor Seňor zů Proi'K$or Locijtor Muchách o Pobre Vendedor Kl. líSTIJňlANTF. Seňor Pobre Vkndedora Muchacíia Pobre Maestra voceador Pefenador Pepenadora Madre de Polo PěPKNAUUB II Pepenadora II Seňora M adrií de Tona Seňora Pobre La Estudiante Hermana de Toňa Dueňo del taller [.os tms (JťK soň a RON Coro de danza Socorro Avelar AnGP.UKA Přt.ÁR7. Jos ŕ Ai.on s o Felio Eli e l Mario Casillas Sergio Jimenez Juan Ancel Martínez Socokmo MkKI.ÍX Héctor Martínez Jesus Lopez Florencio Soni a Montero kKxiiSTc.) Crv.v. Li z a Wjm.f.kt Luz Marí a Hidakío Enrique Campos Carlos Gacina y Jose Mata M ig Ľ el AkgkI. Paimi-.kus Antonia Quiroz Isabel Hernández y R aqu K t. VÁ7.0UF7- La acción en la ciudao de Mexico. Música: Rafael Eli7.0N'DO Coreooraeía: Gľillekmina Bravo Esciínoo.raféa; Gi.'H.i.kRMO barclay Director: Dac-obe iri 0 G m Llacm f n f os dcrtchos imisK.llŕS de la obrí pcrUMCtn ^1 Organismu it Prúrtiooón lMemac\onnl lit Culture y l\)tmii ctdido* gítuilmente por .tu dircclur. cl iŕflw lictnaido Mi(tuti Alv»r«i. Acosta. Aparecen: La I n t kk mew aria ľOt? A Polo Maximino GonzAlk* r" Profľí>ok 2° Profesor l.OtXTOR IVendedou V en DE DO RA VOCEADOR PKI'KNADOR I Pepenadora í Pvi'KNAJJOR H Pepenadora II F.l. F.STUnlANTB La Estujjlante Dueňo del talier íespaňol) Seňor Seňora muchacho poure Much ach a pobre Seňor Pobre Seňora Pobre Maestra Madre de toňa Maure ue Polo hermana de toňa | y los dos que soňaron Un rouchadio. una muchacha, dos mineres y dos hombres son suficientes para actuar los personajes encerrados entre parentesis. En Mexico, D.E (Müska dz davecin. Silencia, Qicuridad. iuz cenilal a h Inter-mediaria: se encuentra sentaäa en una siüa con asiento de paja. Viste como mujer de pueblo: blusa blanca y falda oscura, como el rebozo con que se cubre.) La I n'T FiRMEDl ama—'i oda la tarde oi latir mi corarön. 1 foy cermine tcmprano con mis Ureas y me quedc asf, quieta en mi silla, viendo bor rosa mente cn torno y escuchando los golpecitos discretos y continuos que me daba en el pecho, con sus nudillos, mi corazün: como e) amante cauteloso al querer entrar, como el pollito que picotea las paredes del huevo, para salir a ver la \ui. Me puse a imaginär mi corazön (Sc toca ei pecho), una compleja flor marina, leveroenie sombria, replegado en su cueva, muy capa*, muy metödico, entrcgado al trabaio de regulär extensiones innknsas de canales crcpusculares, anchos como ruta para gondolas reales, angostos como via para llevar verduras y mercancias a lentos golpes de remo; todos pulsando disciplinados, las compuerlas alerta para segiür el ritmo que les marca la enmaranada radiaciön de la potente flor central. Fcnse de pronto: si todas los corazones del mundo sonaran en voje alla... Pero de cso no hay que hablar todavia. Pense en el airc tambien, que por derto olia a hämo v a comida ya fria; yo esUba como un pez, en mi siUa, rodeada por el aire; podia sentirlo en la piel, podia senfir las tenues corrientes que to cnredaban* rn/ä ndome al pasar. Aire que late y circula. Ilice un recuento cntonces de todo cuanto se. ;Se muchas cosas! Co muco yerbas, y algunas euran, otras tienen muy buen sabor, o huelen bien, o son propicias, o pueden causar la muerte t» b locura, o simplem entc luccn cubierras de minuciosas flores. Pero s£ mis: guardo parte de io que he visto: rostros. nubes, panoramas, superficies de rocas, muchas esquinas, gestos, contactos; couservo tambien recuerdos que original-mente l'rieron de mis abuelas, o de mi madre, o de amigos, y muchos que a su vez oyeron ellos a personas muy vjejas. Conozco textos, päginas, ilusiones Se cömo ir a lugares, se caminos. Pero la sabiduria es como el corazön: esti guardada, latiendo, resplandeciendo imper-ceptiblementc, regulando canales ritmicos que en su flujo y en su refiujo van a comunicarseaotros canales, a torrc-nt.es.a otras corrientes inadvertidas y mane ja das por la radiante complejidad de una potente välvula central.,. Todos los dias llegan noticias. To man todas las formas: suenan, relampaguean, se hacen explicitas o pueriles, se entrelaxan, germin an. Uegan noticias, las reeibo, lascomunico, las asimilo, las coutemplo. (Se levanta.);Noticias! 106 E m M i o C a r b a 11 i d o Y o lambiért h ab t o de la rosa 107 (oscumdad) (El cstrucndo de un descarrilamiento: silbatos, gritos, fierros que se arrasiTrtn sobrefierro, vokaduras. Silencio. Relámpagos deslumbradores.) (OSCUR1DAD) (Entra corriendo un wceador.) VOCEADOR—S u prensa, joven, Itevc su periódioo. Muchaehos vagos que descarrilan u n tren. Lea cómo pasó el impresionante desastre, Y cra nomás un tren de carga, qué tal si hurncra sido de patajeros, Lleve s u prensa de hoy, su prensa de hoy... (Sále.) (Oscuridad y en seguida luz generál Una calle: hay una easeta publica de tclčfonos. Polo, subido en un eajónt trata con un alambrc de extraer delicüdamentc la moneda qucguarda el aparato. Tona vigila que nadie venga.) '\'QK.\-(Apri$a.) Apúrate, que ahí vierten. jAguas, agua*! jAhí viene un viejo y creu que va a hablar! Viene viendo una libretita. {Poh salc de la easeta, queda parado junto a la muchacha. Un hombre entm y en efecto va al teléfono. Etttra a la caseta. Los chkos se ven.) ToSA-Está dcÁcompueísto. No si rve ese teléfono. (El hombre ibu a echarla moneda. Se detictxe. Ve a toi muchaehos.) Hombrk-jNo s i rve? POLO Y ToísA-No. (Él cuelga. Se va. Vuelve Polo a su tarea y ella a su vigilancia. El logra al fiti sacar la moneda del aparato. La ven juntos, content os.) TOSiA—iQvé compramos? POLO-Plátanos. TOŇA-[Alegrias! Mejor alcgría*. polo-l3ueno. Tona-En la talzada hay otro reléfono. PoijO—Hasa mucha geme. Me ven. Tona—En la noche no pasa mucha geme. Polo-A ver. ;Vamo$ a comprar) \Caminan hacia un vendcdor de dukes que viene con su tabla.) POLO-^A crtmo las alegrías? VrndedOR—A cinco, a diez y a veinte. holo—Dos de a cinco. Toň'a—Juégale un vola do. POLO-^Hchamos u n volado? Vendkdor—^De a cómo? ton'a-jIJe a veinte! VOLQ-(Dudoso.) Mejor de a diez> mo? Veni>KDOP-Nío se mc raje. De a veinte. Oral e, vuela. Poi.o-iÁguila! VENDE1X)R—Sól (La ven. Pst e scembolsa la moneda y seva. Un silencio. Tonu y Polo caminan.) Tona—Pues yo crcí que... Pue* podías haberle ganado. t.o hu-bicnu echa do lú, (SUencio. Caminan. Patean algoj ToNA-Pues.,. Hubieras dicho que no jugahas el volado. Para quč lo jugaste de a veinte. Yo nomás decía. HOLO—Oh, ya eállese. í SUencio.) Tona—Juégale otro. polo—^C-on qué? Tona—Yo tengo aquí lo de mi camión. POLO—;Y luego con que te vas? ToS"a-Pues... pues... le ganas, $no? PoiO-Si,.. re fácil. TOŇA-Pero échalo tú. Toma. PoLO-jOiga! jOiga! jjugamos otro volado! (Vuelve el Vendedor.) vendp.dor—ilugamos otro? Polo—Yo lo echo. Venl>hoor—^De a cómo? toka-De a veinte. 108 Emilio Carballido Yo tambien hat>Io de la rosa 109 polu-Pe a -v-eime. Vuela. VENDF.DOR—Sol. (Ven.) Sol. (tiecoge la moneda.) To KA-Pues yo lo echo. A ver. Vuela. [Aguila! (Ven.) Ganc. Venubdor—Pero el que echa no pide. Vuela otra vez. ton a—Ah, si, ^verdad? Porque gane yo. No se vale. POLO—Es que es mujer. No sabe. Tona-jY que? ;Yo gane! V'En D KJX) K — A ndal e. ^Que quieren? ToSA-Dos de a diez. (Toman las dukes.) ViNDElXJR—Echamos otro. (EUos se ven.) POLO-Vuela. Dea veinte. (Lo echa.) VtNL>EL>OR-Sol. (Ve.) Sol. ptro? (Kilos niegan. £l recoge ia moneda y se va.) ToS"A-;Para qui 1c eehaste otro? Ya habiamos ganado. Ahi estis, de picado. Ya desacompietf lo de mi camion. Y es re tarde. Or a como me voy a la tstucla. (Corners,) ToNa—De todos modos... no hice la tarea. (Se limpia las manos en el vestido.) jTii no vas a la escuela? polo-No ten go zapatos. Hasta la semana que viene me los com p ran. 1'on a—Pues vete a si. PoiO—La maestra revisa al cntrar si les dimos grasa. Ni modo que me de grasa en las patas. TONA-Me queda un veiutc. ^Compramos jkama? POLO-liueno. \Ahora hay una vieja vcndtendii jkama.) Polo-Dos dc a cinco. Vieja—Son de a diez. ToSfA—Kstan re caras. Y chiquitas. A dos por quince, >no? VlEjA-Andele, pues. ToSA-Con chile. 'La prepara, $e las da, pagan, comen.) POIO-Queda un qui n to. TOSA-Lo guardamos, para el rato. (Megan ol tdefono.) POLO—iOcunenau repentina.) ^No habra hablado nadie? (F.rttra a In cascta, aha la bocina, la cuelga dc nuevo; cae un veinte, devuelto. Lo s-flca, atoniio.) POLU-fSalio solito! jCayo un veinte solo! [Mira, tin veinte! ;Lo alee y .wJid! (Tona entru corriendo y aha y baja la bocina, goipea el aparaio, lo sacude, le mueve. el disco, le jalonea el gancho, muy aprisa y con mucha yiolencui. Cueiga.) TOKA-Ya no salen mas. POl.O—Ahi viene Maximino. ;Quihubo! (Losaludun. Entra Maximmo. Unos23anos. Viste sudadera blanca, no may limpia, pantaldn de mczdilla vie jo, zapatos terns.) MAXtMtN'O-Quihubo. TO^a-Kos encontramos un veinte en el telefono. P.ste lo alzo y salio solito. POLO—Y yo le saque otro, con un alambre. MAXIMINO-Andele y que les caigan. TottA-;Que nos hacen? MaximiNO—Me los guardan cinco anos, o mas. TOSA—A poco. Por un veinte. MAXiMLNO-Pues claro. TOSa-Yo nada mas le eche aguas. MAX[MiKt)-C6mplice. Cuatro anos. (Breve silenoo mcomodo.) Poi .<'>-;Y tu moto? TOtsA-fS* le cuelga del brazo.) Llevanos a dar una vuelta. MAXIMtNO-Hsta re fregada. PolO-^Quc- le pa so? maxim [NO-La corn mucho sin aceite, se desbieio, la patada qued6 trabada... (Tohu se rie.) 110 E m i I i o G a r b a I I i d o Yo también hablo de ta rosa 111 Maximino-Mira ésta, £de qué se ríe? TON'A-Pues cómo que ta paráda, será la rueda. POLO—Ay, Tan brut a, la patada es ta m archa. TOIÍA—Ay, sú tú, tanto que enriendes. P0L0-4tú la vas a a r regia r ľ MaXIMJMO—No, en d taller, cómo. Hay que recti í i curla. Tofía—Lo que pasa, que esa motocideta ni sirve. POLO—Nomas estás ha blan do de hoc icon a, ni sabes nada de nada, TOŇ A—j Y r ú sí sabes! A po co es muy buena. Ya cstá rete usadá. MaXIMIN'O—ffľurí orgullo.) 250 centímetros ciibicos de citindrada y un caballaje de 16. Nomas. ToŇA-;Y eso qué? MAXIMINO—Kso quiere decir que es muy hue na. ToSa—(Convencida.) Aaah. Pues yo la veäa lan vieja... Maxim [NO-;Y ora qué hacen aquí? ;No fueron a la escuela? polo-Yo no ten go lapatos vesta se gastó e] dinero de su cam ión. TONA—Se lo gast ň él, se lo jugó en volados. POLO-Chismosa. vieja había de ser. Ella quiso jugar. Maxi min o-Te doy para tu camión. Tona—De todos m »dos... No había hecho mi tarea. Mejor me hates una carta diciendo que estuve enferma. í me la haces? Maximi no—Hueno, qué d ig»? ToKA-Te la dieto luego. MAXI Ml no—i Y ad onde van a largarse toda la man ana? Polo—Pucs... a ver. Várno nos por la via, tu. ToNA-Puros basureros bay alii. Polo—Luego encuentra uno cosas. Y se %'e pasar el rren. ToNA-iQué traes a qui? ľ)éjame ver. (La car tem de Maximino, que él tme en pan talón.) la boha posterior del POLO-Ora, no ti enté. TONA—[Jeja ver. (Le saca la cartera. Se sien ta a ver lo que conliene. Max y Polo la observan, con paciencia masculina.) tona-Ay qué guapo saliste en este retrato. Regálamelo. MaXIMíMO-Sí, se rompió la cámara. ^Para qué lo quieres? Tots a-Para tenor! o. Regálamelo. Maxi Ml n o-No, luego lo necesito y no tengo. TOSa—Si me lo das... lo pongo en mi espejo. en d cuarto. polo-Lo va a enseňar y va a decir que eres su novio. Tona—Men tiras, qué te im porta. Regálamelo. MAXIMINO—Bueno, tenlo. I'Ols'a-Pero eseríbele algo, anda. (Maximino encuentra esto muy áificil. Totnasu lapicero, va a poner algo.) MaximiMO-No, para qué. Llévatelo asi. ToŇA-Cscribele, anda, eseríbele. (Maximino piensa. Sie sienta y escribe dificultosamente. Se detiene. Piensa cle nuevo. Escribe. Firma con gro n rúbrica que apenas cabe en el cartancito. Lo da, un poco ruboroso, a la muchacha.) ToNA-('l€ť.,) *Para mi amiguita Tona. Con sincero aprecio, de su amigo Maximino Gonzalez». lo voy a poner en mi espejn, en el cuarto. Polo—Amiguita no lleva ha ehe. TOŇA-Ay, sí, tú, tanto que sabes, por eso sigues en qui n to. A ver qué más traes. jÉstos son t us papás? MAXIMINO-Sí. Tona—Mira, tus papás. ^Quién es ésta? M aximiko- M i cham act> n j . ToŇA-^Ésta flaca tan fea? Y está bizea. Maximino—fíizca estarás tú. (Le quiia la cartera. se la gitarda.) tona-Kstá bizea. Tiene un oj o al norte y otro al s u r. (Maximino saca su cartera, ve la foto. La emeňa luego.) Maximino-A ver, ;dóndc esrá biľ.ca? Quisieras. (Se la guarda.) toňa-Está biľ.ca. Maximino—Ahí ros vemos. TOS a—Mentiras, no está bwca., no te vayas. Maximi no-Ya me voy a chambiar. f.s tarde. Polo—Ándale. Maximino-Nos vemos. (Va saliendo.) ;Ko quieres para tu Cam ión? TotíA-No h ice mi tarea. (Maximino va a salir. Ella dice:) O yes, cuando me retrate, te doy uno, pero lo pones en tu cartera, i eh? 112 E m i I i o C a r b a 11 i d o Y o tam b ién h ä b i o de ta rosa 113 MaximiNO-Sí. (Sale.) TOŇ A—t Legrita.) Salúdame a Ojitos Chuecos. (Se r U. j POLO—^De veras está bizca? ToSa—Si... No, í Ve la foto.) La voy a poner en mi espejo. POLO-Maximino si es cuate. (Salen.) (Oscuridad a elhs, luz ál basurero. P.s una n]fambra de basura. P.n icrtio a ella, pian tas y ramus. M fando, la via del treu. Luz del diu, sol radiante. Los pcpenadores recogen papelcs, alguna botclla entern, revisan otros objet os de desce fio que encuentran y los guardan o los tiran. Ella lattza una pequeňa exclamation y se ve el pie; vc un troxo de vidrio que la lastimó. Masculla algo. Sale cojeando. El hombre la ve ir, siguc sit tarea. Sc arrodilla entre la basura; descubre u n zapato, lo observa, lo deja. Por la via, que está at fondo, vienen Tona y Polo, haciendo equilibrios en un riel. El Pcpenador iba a salir, recogiendo lo que k sirve al paso. Ve a los mucbachos. Se dirige a etlos.) Pt.nyihftQk—fAguardentoso.) Jo ven, ;iio tiene u n qui n lito? Polo-Mo lengo. Pki'KNADOR—Para cur arme. Ando mal. í Polo niega.) (Pepcnador va a salir.) ToSa-; Sertor! Ora, Polo, dale. Sonor, venga. f Polo hace una mueca. Le da el dinero.) pepek a DOR- (Tan confuso que cast no se enxiende.) Dios los ha de ravorecer. (Sale.) TotsA-^Le diste todo? POLO-Pues sí. TORA—íTc pídi ó un quin lito! Ay, que larugo. Polo—jPues t ú dijiste que le diera! To ft A—Perc no todo. Te pidió u n quintito Polo—Loca y además coda. TO Ň A—Ya n i modo. Hiiele re macizo aqui. POIO-A basura. Tos a—A... yerbas. Si, a yerbas re fuerte. Esas yerbas. Y huele a... Hay m uch as moscas. Ha de naber un animal muerto. (Se pone a can Jar a gritos una esperie de acompaňamiento de orquesta, baňa.) Poj.O-Tas loca, tú. TOSa-^No sabes bailar? Mi hermana me enseiió éste, mira. (Hace ti paso, caniando.) ^Ko sabes? POLO—Si. (Haila un momenta con ella, luego se aleja. La deja baildrido.) ;Una pieza de motor! (Saca un fierra irreconocible, de entre la basura, le da vuellas pcrplejas entre las manos) TORA—i Para que sirve? POLO—Para u n motor. Se lo voy a llcvar a Maxim i no. (I.a deja a un lado.) 1 OSA—Voy a bater un ramo de flores. (Umpicza a cottar jhrecitas minúsculas. Crita.) polo-jQ lie pasó? To Ň a—Me piqué. Tiene espiiias. Ay, ma madia linda. (Se chupa el dedo. Trucuknta.) Mira: me salió sangre. f (ľurrfc y baila su paso nuevo, carta flares.) PoiO-Ayer fui a ver «F.! enmascarado negro contra los mons-truos*. TOŇA—Yo fui a ver el domingo, «La mansion de la sombra negra*. Me dio Tanto miedo que en la noche gritě, porque soňé cosas. Poi o-^Qué soňasic? TORA— Quién sabe. Re feo. řstas son avispas. Hay muchas. Y pi can. PoiO-Te pica n si les Tienes miedo. (Él hacc equilibrios en el riel.) ľOLO-Hay unos lipos que caminan en alambres, rele alto; agarran u n palo para hacer equilibrios y caminan. Se ha de poder. Totš'a-Sí. Salen en el cíne. Polo-Pero ab í son p u ros trucos. Tona—Yo vi una que se para sobre un caballo y luego va en un pic, asi, y el caballo corre. Yo lo vi. En el circo. POLO-;Cuándo fuistes? ToRA—Una ve/.. Me llevó mi papá. 114 E m H i p Carfa a I I i cf o Polo-; No que se murió tu papá? to.na-Pues sí, pero antcs me llevó al circo. Era re buena gente mi papá. También había u n oso que andaba en bicicleta. polo—Qué ch iste tiene and a r en bicicleta. tona—Pues ai oso k daba rete harto trabajo. Mira las ffores qne junté. l'OLO-Tan poquitas. TOŇA-Luego junto más, no m e vayan a picar Ijs avispas. [MiraJ Esa lata está buena para mačeta, Para u na planta bi en grande. (Es una lata redonda. de buen tamaňo. La va a tomar, no puede alzarla.) TOK.a-Ay, pesa. PULO-A poco. Ya. (Lc chifki su burla.) No puedes alzarla. f Vu: tampoco ét puede. Trata de nuevo: no puede. $e monta casi sobre clla, sin lograr levantarla. Ella se ríe tanto que se le caen lasflorcs. Las recoge, riéndose. J Holo—jY ora? ;Qué k pasa a esro? (i>e ha asustado un poco. Tona se queda séria: nota algo irreal en el peso de aquello.) ToNa-;No puedes? Po (.o— iPreoc upado.) Nu. (Tona da un gritiio. .Se ale ja aprctando sus fíores contra el pécho.) TOKA-£s muy raro que pese tanto. Pot.o—Miedosa. (Se aleja de la lata. Un silencio.) A ver quŕ tiene esto. tona—Déiala mejor. POLO- ? U da vuclias cun cauiela.) ;Por quŕ pesará Tanto? jEstá liena de cementu! i'oňa-iSí? iPor qué? POLO—Ha de ser u na de esa s que agarran los albaňiles para.., cosas. Mira r está liena de ceinento. TO^a-Ah. Eäo era. (Ve.) Si. Está liena de cemento. No sirve para mačeta. el pJO) P°"e ' emtat y baÍkr ÍU paS°- Lue*° * ?0n* «»« ^eätas en Yo también hablo de la rosa 115 TONA-Mira, qué tal. POLO—(Rueda la lata con el pie.) Se puede radar. A ver, ayúdame. ToŇA-Esperate. (Se pone otras flores.) Ahora sí. (lo ayuda. Ruedan la lata.) Tona—iDónde la llevamos? Pos.O—Al otro lado de la vía. (La ruedan hacia elfondo.) Por allá está más difícil. (La llevan rodando hacia lo más difícil: elfondo, a la izquierda. Se oye el sdbato del tren.) TofcA-Apúrate, que ahí viene el tren. (Se apuran. Están en lo más alto del terrerto. Se oye lejos el silbato del tren. Se ven.) Lo* dos—jVamos a ponerla en la vía! (La idea les da risa nerviosa y alegre. Empujan. La lata pesa y en el suelo hay obstáculos, qukre regres&rse. Ellos empujan. Suena el silbato, más cena. tfios empujan la lata. Salen. Silbatazos. El tren llega. La luz disminuye. Seoyeelestruendodeldescarrilamiento. Oscuridad. Relámpa-gos que ilunúnan a los muchaciws en la misma postura, viendo faschia-doi.) (OÍCVJUtMD) VoCfiADOR—(St le oye en lo oseuro.) Lea la noticia del descarrila-miento. ťirandes pérdidas. Grandes pérdidas. Grave desastre ocasiona-do por unos vagos. La prensa de hoy, la prensa de hoy. (Luz. La Intcrmediaria está ante un enomxe libro, puesto en un atrii o en algo propio para hojcarlo. Irá mostrando grabados enormes y minuáosos que hay en cada hoja. Son quizá grabados antiguos, podría pensarseen Durero, o en ciertas láminas botánicas o Zoológicas alemanas del x/x, o en los códkcs mexkanos [o en las (res cosasj. Están tenuemente policromados. Hlla viste en colores algo más claros.) INTERMEDIARIa—En este libro hay imágenes de animales, (Lo abre.) Dare noticia de ellos. Hl perro está inserito aquí como guardián de la inregridad física del humbre que le haya sido designado. Onko etttre las bestias, posee sentido de propiedad, siempre nos dice: «mi casa, mi patio, mi árbol, mi dinero, mi amo, mi a mor x. Lo cuida y lo 116 Emil io Carballido Yo tambi6n hablo de la rosa U7 defiende como un avaro, como un apasionado, dcscubre asi ladrones, descubre a pedigüenos, descubre cobradores, y a todos ladra y agrede. «Yo proteio a im amo y al mundo». El cree que su casa es el eie de) mundo. (Otra ho ja.) F.l gato cuida la inregridaJ espiritual de quiencs considera sus amigos. El recoge las sombras, 6\ expulsa las inalas voluntades: hace pequenos sacrifkios sangrienros por el bien de la casa: mata ratones huidizos, aves canoras y pol los asombrados: luego, con la presa enlre los dienlcs reali/arä un rilo. En Ij noche va a la azotea: analiza los halos, las ondas, los vapores. consulta el aire, se le confian tareas, corre y da gritos espeluznados, se perpetüa... O se entrega gusloso a los estragos de algün rayo secrelo, que estaba destinado a personas de su mäs alta estimaciöti. Por eso hay gatos que perecen de manera enigmitica. -'Otra hoja.) La gaJlina es im gran almacen alimenticio: da diariameme, con un esfuerzo duke. huevos de rigurosa estetica que encierran en su cäscara una explosiön inmensa de corrales; y preguntas eternas, como: ^quidn fue primero?... Mas cuidado si al partirlos hay en la clara nubarrones o la yema es confusa: tal vez alguna vieja limpiö un cuerpo de pasiones y enfermedades con ese huevo, tal vc/. hemos quebrado la pequetia «ja de una Pandora de la vecindad, y mientras ella riesu salud recobrada, nosotros nos hallamo.v a un paso de ingerir sus viejos niales. (Otra hoja.) Cuidado con los peecs de colores; hacen cireufos caprichnsos tejen, destejen, tejen esc ri tu ras oceänicas, ven con sus ojos muertos a traves 'lSlOR-Mo. Hra un Iren de carga. Se voltearon carros. Mira qu^ caras. Dice que tienen... doce y catorce atios. i'arecen de 40- (l.uz al fondo: dos fotos mormes de Tona y Polo, tun simestras como cualcjuier fota dz policia: se ven avejemados y asustados, capturados a la mit ad de alguna fcve mueca desconcertadu.) SESOHA—fDistrahla.) Es el vicio. Esa gente es viciosa desde chica. senor-iVtendo si viene el camiön.} [Ha de ser !a miseria! Senora-Si, la miseria es horrible. ^No decia nada de) descuarliza- senor—AJU viene el camiön. (Van a tomarlo.) Vo<~e.\rX)r-Noticias, la prensa de hoy... (OSCVKlDAD) (luz a la Maestra, que avanza a primer termino, muy polveada, r-izada «permanente», bvea pcquena muy roja, tiene unos 60 anos.) Ma&STRA—Ante* de que empecemos la clase quiero que .wpan algo muy triste y vergon2oso para esta escuela: un compaiiero de ustedes, Leopoldo Bravo, ha cometido un acto delictuoso y se eneuentra preso. C<»mo dice bien el periödico, ha sido culpa de la vagancia y (Lee.) la malvivencia. Ese muchacho estaba repitiendo el quinto ano, no se por que lo admitieron. ;No vamos a adraitir reprobados el aiio entranie! |Lo oyen! Vagancia, estupidez y... falta de civismo. (Lee.) Los delm-cuentes juveniles quedaron inmoviles junto a la via, viendo su obra. Fueron capturados facilmente. (Aiiente, busca otw irozo ejcmplar.) Debe culparse tambien al abandono de los padres (Asicnte.) que dejan a sus hijos entregados a la vagancia, y al deseuido de los maes... (Calla. Dobia el periödico.') Pues ya lo sahen, eso pasö- Se lo he dicho porque e«o tiene una leccion para todos: no deben andar de vagos. Tu, Martinez i'edro, que nunca traes la tarea, öyelo bien: tu amigote ya estä en la cärcel. y tu, Antünez, fijatc; si repruebas, ;no vuelvas a esta escuela! y acue"rdense que deben traer su uniforme blanco para el lunes sin falta, o no serän reeibidos. Ko hay pretexto: no me salgan 118 E m i i j o C a r b a 11 i d o Yo también habio de la rosa 119 con que no tienen para comprarlo, que en otras cosas si gaštan. Ahora, vamos a ver, los quebrados. Tú mismo, Antúnez, dinos: ;qué es el común denominador? (OSCURtUAl>) (Dos cstudiantcs universitäres leen el periódicn.) LA CSTUntANi'b-iYa viste? Unos chamaquitos descarrilaron un tren. Estos, mira. F.l estľdiakte—Qué bárbaros. ;No se mató nadie? {Let.) La est upi ante—No, de casualidad. Era un tren de carga. EL estu Dl a n'i t—Q ué vaciados escuincles. Sc volaren la barda. fStíe.) l.a esi ľdiante—Se voltearon dos carros y la raáquina se Revo un árbol de corbata. |Se rompió toda! (Se rie.) .jPero qué les daria por hacer eso? Hl estudi ante—Puntada. La f.STuíMANTE-Qué tipos, se inspiraron. (Se ríen.) (oscvridad) (Fl toiler. Maximino trabaja en un motor. Suerta t! teléfono.) MaXI Ml no—Rue no. — *Afinaciones Larranaga». -Yo sov, h ab la Maximino. -Ah, quihúbole. -;Cuiles cuates míos? -^A la cárcel? —;Cónio va a xer! -;A lo macho? -[Les caycron en un teléíono! — ;Un qué? [Un tren! -^Cömoque descarrilaron untren? ;Palabra? —^Adónde se ios líevaron? -Ssss... Chin. Qué bruto. Pero cónio va a str. Bueno, a ver qué se hace. -$í, son mis cuates, qué bueno que avisaste. Ándale, adiós. (Cueigaj (Se queda pensativo. Entra ei dueňo del taller. Vista union de mczclilla.) Maximino—Don Pepe, voy a tone r que irmc. $e Uevaron unos amigos a la tárcel. Don pepe-;Y tú por qué andas metido en esu? Maximino—A mi nomas me acaban de avisar. Son cuates. DON" Ppea—;Qué hkierun? ;Por qué se los llevaron? maximino—Descarrilaron un tren. Don pepe-MfcrrodaJ [Omunistas! Maximino—No, no. Son dos chamaquiros, chkos. Los ha de coflocer. A veces los traigo h asta acá, en la moto. Polo y Tona. Don PbľF.-f'AÍKŕve la cabeza.'j Je hicieron algo a un tranvia. Por ir alii colgados... MakjmI.no—No, iren. Ferrocarril. Dicen que lu voltearon, no sé bien. dos' PtľK—Bueno, anda, pero regresas en una hora y acabas con esto que me lo encargaron de urgencia. Maximino—Si. ciaro. DON Peek—Lo que tardes, luego to quedas. MaxiMINO-Sí, seguro. Seguro. Quien no lo ve, tan muslio? Cabresto mocoso tan idiota, ^ya ve dónde vino a dar? (Se desploma llorando.) Y ahora van a tcnerte aquí, quičn sabe cuánto tiempo, revuelto con una bola de criminates. Tu papá tenia razón, te he consentido m ucho, te he tenido pegado a mi, te extra no todo el tiempo, y hasta he pensado, Dios no lo qui era, que cómtj no fue mejor a alguno de tus hermanos al que se llevaron. Asi es una, siempre engreida con lo peor. Ay, Polo, cómo le vamos a hater para que saigas. Cómo le vamos a hacer. (OSCURIDAti) (Ľntra et Voceador. Sus periódicos son ahora hojas llenas de manchas, como Ith pruehas de Korschach. Las enseňa, voceando:) Voceador—Noiicias, noricias, lea sus noticias en la prensa. Jóvenes esqui/oides producen grave trauma publico... Moment» de obaubilación que cuesta medio milión de pesos... Noticias de hoy. Noiicias de hoy... (Sale.) (Erttra el Primer Profesor, viste exageradamenie bien.) profesor—Nuestro siglo ha venido poniendo u n énfasis especial a los problemas colectivos. Es natural, en cierto modo; vivimos masivamente. I.a industriali/ación, el sindicalismo, los enormes problemas urbanos colocan ante nuestros ojos grandes conglomerados human os. Grandes con glome rados... (Sonne.) ...de individuos. Aqui está el núcleo: en el Yo. Un Yo complejo, compuesto de nuchas capas que se envuelven unas a otras, como... como las hojas de... una rosa. So mos imrineados, y la palabra »complejo» ha arraigado de tal man er a en el lenguaje cotidiano que ya la usa el pacientc común, digo, el hombre común, como si se tratara de algo simple. Desentraňar Y o í a m b i ó n hablo de la rosa 725 complejos es deseubrir los cngranaies que mueven los hilos de la conducts cotidiana.quc conducen a los núcleo.s traumáricos. Debemos llevar por ellos la inteligencia del paciente, hasta que él mismo dfSOibra la secreta razón de jus impulsos. El inconscienle maneja cl acto fallido como una especie de ŕormulacion explícita, y ]a más neutra de las conversaciones manifiesta una carga de contenido oculto que, interpreiado correctamente. nos conduce al diagnóstico en. cuánto a aherrnciones de la conducts. Tornemos un hecho diíícilmente explicable si lo consideiamos aclo consciente: dos adolescentes descarrilan un tren. Algunos antecedentes nos permitirán volver explfcilOS los factum sumergidos del caso. Fnnnulándolos, veremos cómo se vuelve lógico y coherent e. Í.Se hacť a un lade I Profesor-Pol o está en la cabina de Teléfonos tratando de sacar la moneda. lona 'e vive snlamente en función de una sociedad dc la cua! ha sido easuulmente segregado. Hemos sido testigos del heeho comentado por la prensa: una clara expression de la lucha de clases. Protagonista*: dos niňos proletarios. (ľrinápia la escena del teléfono.) tona-Apúrate, creo que viene un burgués. (Llega el hombre.) TOSIA—No sirve ese teléfono, com o la empresa es un monopol i o dan muy mal servido. (El hombre se indigna, muldice el aparato y se va. Los niňos sc burlan de A) Y o también hablo de la rosa 129 ľROFh'SOR-Observen funcionar el ingenio, una de las armas típicas del Pueblo. Ahora, ante esa máquina, que no está puesta a su servido, la niňa tiene un primer gesto de rebeldía. {Tona gotpea el telefot to, lo sacude.) TOSA-ťQué compramosľ polo—Plátanos, que son un aümento completo. ToŇA-Alegrías, que contienen más calorias. POLO—Tuvimos uu desayuno muy deficiente. TOSa—¥á típico de la sociedad capitalista en que vivimos. profesor—I-a ťalta de un adecuado poder adquisitivo en las monedas, haee que se busque la compenwición en el azar. Rasgo típico en los paises subdesarrollados: la aríción popular al juego. (Věmos en pantomima Li encena de los volados y la compra de jkama. Los niňos comen vorazmente.) Tona—^No vas a la escuela? polo-Ňo puedo ir. Tona—^Por qué? POlO-Por las exageradas petic iones economical de un mal sistema educativo. Gasto en transportes, exigencias de la maestra, mues cómoí I OSA-;Los locales son insuficientes! Se han de porlar asi para ahuyentamos. Profesor-Van a encontrarse ahora con un compendio vivo de sus aspiraciones juveniles: un joven obrer«. (Entra Maximino, muy litnpio y phnehado, radiante.) PROFESOR—Un autémico representante de su clase: explotado, solidario, abnegado, incorruptible, fraternal, vigoroso, alerta. Con el ejemplo, é! va inculcándoles ideas y prindpios. maximino-^ Y adónde piensan ir toda la ma na na? polo—rues... a ver. Vámonos por la via, tú. Tona—Puros basureros hav pllí. P0!o—Luego encuentra uno cosas. jY se ve pasar el tren! profesor-En el rostro de Maximino ellos leen eómo el sindica-lismo corrupto, que ha entregado a los trabajadores al poder del capiralismo, ha hecho que los Irenes en que se hizo nuestra Revolución corran cargando las mercancías de los monopolios. 130 E m i i i o car b all id o Yo también hsblo de la rosa 131 (Mttda exprcstón enlre los tres. Ella vc la cart era de Maximirto.) profesor—Ahura la niňa solicita ana rúto: ella no va a rener entronizados a los idolos falsos de las industrias cinematográfieas que sir ven a) imperialism o: ella va a guardar la imagen de un camarada. ToSa—^Quien es ésta? Maximino-Mí chamacona. ToříA-f/^i observa. Adviertecon can tela.) Eslá bi/xa. Tiene un ojo al nořte y otro al sur. MAXlMlNO-^Qué quieres decir con eso? TOŇ A—Que es pequefio-burgucsa y sus ideas son estrábicas. Ten cuidado. (Maximino sale, muy preocupado.) PROFPSOR—Podemos ver ahora una cxpresión de los bailes con que el capitalismo corrompe el verdadero espiritu del pueblo. (Tumi y Polo bailan ridículatnente. El basurero e$ retocado: en vez de simbolos sexuales se advicrtcn ahora las marcas de muchos pwductos yanquis, de chicles, re frescos, etc.) PKOKbSOB-La auténticaexpresión dela alegria vital deestos niňos seria o tra. (Tona y Polo bailan un jarabc.) Pkohésor—Adviertan que el basurero es una imagen elocuentede lo que hacc una produeción sin planeamiento, y de las falsas necesida-des que crea. Vean ahora la relation fraternal de los niňos con el proletariado lumpen. PEPENADOR- (Muy enjermo.) Ayúdeme a curarme ando muy mal. '['QŇA-Ayúdalo. EJlos no ticncn stguridad social. POLO—Nosotros tampoco: es para unos cuamos privilegiados. \Se despiden fraternalmcnte del Pepenador. l.uego, ven la lata y cast se sobresahan: se consul tan can la mirada. vuelven a ver la lata.) Profesor—A testiguamos el naci mien to de una confusa concicncia social. Las contradiction es extremas producen resultados extremos. TOŇ A—Dej a esa lata. Me da miedo. Poto—El Terror es el principio de las revoluciones. TONA—Se talan los árbotes en bencficio del bosque... Poi.o—jY quién va a culpar al leňador que despeja el campo para la siembra? (Se esauha un himno. los muchachos entpujati el bote con gesto heroko. Seescuchaeltren. Descarrilantiento. Oscuridad. Relámpagos, que ahora son mús largos y nos permiten ver cómo los niňos pertnanccen unidos en actitud estatuuria, mientras los Pepenadores y los otros personajes del barrio saquean el tren, conto en un desfile triwtfal. En tra Maxittiinoy campleta el grupo escultórico.) PROťKSOR—Kl hombre es kconomía. La Vida entera descansa en la inlraestructura economica. No hay aquí ningún acto inexplicable, vino tipico de su Oase, hasla en la falta de verdadera direction intc-lectual. (OSCURlDAIi) (Luz a Maximino y Tona, sentados. Sombra de rcjas.) MaximiKO-J'ero que brutos son. C6mo se les va a ocurrir, voltear un tren. TošA—fMuy apurada.) Pues nadá más queriamos ver que pasaba. .MAXlMtfs'o—Ya vieron. {No se les ocurrió que alguien pudo matarse? TOS'A-l'uesluego sí.poreso ni corrimos. Nos diotanto sustoque ahi nos quedamos tiesos. Ay, se vio re fro. Maximino—Pues claro. La máquina medio se cayó, tres carros se volte aum y se rompieron. Y luego viriieron una bola de tipos de ese rumbo y se robaron las mercancías. ^Sahes cuánto costó el chisie? Medio milión de pesos. ToŇA-jTanto! (Se queda pensando.) jComo cuánto será eso? MaXIMJNO— Pero que brutos son. Yo queria ver si pagando una multa salian fuera, pero que va. £ste fuc un chiste muy caro. (Un silencio.'i Tona—(Truadettta.) Hay uius ninas conmigo que le echaron una olla de agua hirviendo a un seňor, tuando les ftie a cobrar la renta. Que di/.que no lue adrede, ^lú crees? Y hay una ehamaca que vend i a mariguana. Y luego hay oira que cobraba dinero por ensenar encuera-das a unas niňas, ;y les cayeron las mamás tle las niňas! Pero ella dice que a las niňas sí les gustaba mucbo encuerarse. MA-;Palabra? MaXIM [no-Palabra. TofcA— (Lo abraza de pronto. llorosa.) Y ven a ver nic mucho, cada vez que se pueda. Ven a verme mucho, mucho, rnucho, mucho. mucho, mucho... (El la abraza acongojado.) (El basurero de noche. Eslán los Pepcnadorcs con un amigo y una nmiga. Fogata. Esta escena deberá $er maliciosa, ticrrui. Nunca sucia ni orgiástico.) PEPEKaduR-Pues muy humilde y niuy fregada, pero en mi casa no hace trio. Yo mismo la hice con unas tablas muy buenas que me encontré, y con cartones en las retidijas; le puse su buen techo de lamina, que mi trabajo me costó quitarle a un gallinero de por ahí. A ver cuándo viene usté a visitarme. Pepknai)ora—Pues ahí usté dirá. PkkenaDOK—Por cl gusto de que nos acompaňa, le voy a dedicar esta cancion: (Canta y se acompaňa con guitarra.) Eres rosa de Caslilla que con el rocío se indina... lástima e ya estás seca, sólo que dan las espinas. Pienes ojos de lucero cuando el cielo está nublado, tienes cuerpo como Venus, como el gordo Venustiano. PePENAdora—Cómo será usté grošem, ya verá. PEl'enador—(St ríe.) Pášeme la botella. (Bebe.) El. amigo-Y a poco también el tequila lo sacaron del rrcn. 1'EPťNai>or-Como quien dice. Vendimos un costalito de PSPENADORA—Los tamales los cambalaché yo, por unos kilos de azúcar. La amiga—rfnfíma.) Aquí el seňor es gente seria, yo lo conozco. Y viera que es rete lišto para ganar centavos. Pepenaix^ra—Para eso, yo también me doy mis maňas. El. amigo—Muy bien dicen por ahí> que más vale mal acompaňa-do y no solo. PkPENADORA—Ah qué ustedes, quién sabe por qué dirán esas cosas. PEFttlAlJOR— (Canta.) Tu boquita me provoca pa que la cierres un rato, tienes unos dientes lindos, JástLma que falten rantos. 134 E m i I i o C a t b a H i d o Tu garganta es com« un rio, ia conozco por sus cantos... tu garganta es com« un rio de esos que parecen cahos. fGritos y aplausos.) P epen a dora—Cdmo serä ustc\ No me gustö la cancidn. PEPENAOOR-jA lo macho no le gusto? Estamos ante la imagen de la flor de un arbusto Yo también hablo de la rosa 135 dicotiledóneo de la familia de las rosáceas? tO se trata, por lo contrario, de una rosa divina que, en gentil cultura, amago es de la humana arquitectura? A vet, seňorita, a ver... O usted, seňor... Es una cosa u o tra, las dos no. ^Nadíe se anima a contestar? (Pausita un poco de-cepcionada. Duplkasu animación.) Pues vamos adelante. Se trata ahora de condenar definitiva mentě, para que se supriman con absoluto rigor, las imágenes que sean denunciadas como falsas. Véanlas bien, son třes: una sola es la auténtica. Las otřas dos: que se las borre de los libros. Que nadie las conozea. Que se persiga a quienes las divulguen. Que se vigile, o se aísle o se suprima a quienes crean en eilas. Mucha atención: esto se supone que es una rosa; do es? Esto se supone que es un pétalo: £ÍO es? Esto se supone que es el tejido del pétalo visto al microscopio: do es? Primera hipótesis: sin el pétalo no hay rosas. Con temple n ésta; quítenle los pétalos, ^qué queda? jNo hay rosas! ;Jamás han existido! No hay más que pétalos. Segunda hipótesis: el pétalo solo no es nada, ^cuándo se le ha visto crecer asi? ;Qué tallo lo produce? ^Quien advierte si faltan dos, o třes, en una rosa? ;No hay pétalos! Cnicamcitte hay rosas. Tercera hipótesis: no hay pétalos ni rosas. Hay solamente una reunion de células, un tejido. Suprímanlo y no hay nada. Y ese tejido es materia prima a secas, nialeria viva. Y esa materia no es materia, es energía. ;No hay materia, no hay pétalos, no hay rosa, no hay perfume, no hay nada! Hay tan sólo un conjunto de ficciones milagrosas, y una se Hama rosa y otřas se llaman de otros niodos, un milagm tras otro, poriodas partes, sin posibilidad alguna de explicación racional. (Seňala las ires imágenes.) Si aceptan una de estas imágenes como ciertas se rán falsas lodas las otřas, porque nadie pretenderá que hay varias comesta-ciones a una sola pregunta, Cualquier inteleclual podrá decirles que una respuesta excluye a todas las demás. Asi son las cosas y estamos entre intelectuales, ;no es cierto? ^Cuál es la imagen verdadera? iEsta? ;:itWED[ARlA-fSo(jrí'eJ No sabemos ni el gesto que nuestras manos ha rán dentro de u n rato. (Cac un kaz dc luz al bote de cetnento.) Voces—At rás de cada paso hay una esquina. —Gada paso es un rumbo. -Entre un momentu de elección y el siguiente cruzan muchos caminos, -Por eso siempre nos encontramos don de no pen sa mo s Uegar, y no sabemos cómo. -Y tampoco sabemos los frutos de cada acto. -Hay p lan tas que dan flor antes que otras. -Hay árboles que crecen muy despacio. TOÍíÁ-;Mira! Esa lata está buena para maceta. Para una planta bien grande. (Van a empujar la lata. Dudan. Se deaden. Mientras:} VOCES— (Solus y a coro.) La elección es una sola cara de la moneda que está siempre en el aire. -La libertad es u n gesto loco. -La election es u n gesto loco. -La libertad torna la forma del gesto con que la eseogemos. (Ellas empiezan a etnpujar la lata bacia la via.) VOCES—Y también hav la grácia. -El cirto gratis. 138 Emilío C a r b a 11 i d O -Las colas de papel que un gran bromista les prendió a los cometas. -El día y la noche. —I.as olas. —Los rayos. —F.l día de fiesta. —El canguro y el armadillo. -El areo irjs y cl eco. —La vida diaria. —[Gracias! (Eiias han Uevado el tanque al sitio dondepasará el třen. Empiezan a oírse rhus alcgres en denedor. Se oye cl estrépito del descarrilamiento, luego se transforma en múska. Un gran grito de alegria. Luces decobres y respbndores movibles por tůdas partes. Entran todos bs personajes corriendo: Maximino, los Pepenadores, In Gente de la calle, Vendedorcs, Profesores, Locator, Parientes, Los dos que soňaron, todos. se abrazan, sebesan, bailan, muy cuóticamentc.) Intermediaria—(A griios.) jSaben cOmo muy pronto sucedio un cambio sorprendente? ;Y saben cómo Polo llegó a instalar un taller? cómo fue cl matrimonio de 'lofia? (La gente empieza a bailar en orden. ya hay cierta simetría en los Intu rme Dl a r i a—Esa... ya es otra historia. (Hl diseřto del bade se bace ya claro, evidente.) ÍNTERMKDIARjA-ÍPrť^wwftj conw maestra.) jY el fulgor de esa estrella extinguida, desde hace tantos aňos luz? ToSJa—(Reata la lecáón, abrazandoa Maximino.) Seguía llegando al telescopic pero quería decir tan sólo la vida humtlde de un cazador peludo que un amigo pintor retrató cn las paredes dc una cueva africana. (El bade se vuelve. ahcira una especie de cadena algo solemne, (cidos pasan de mano en mano, combindndose con precision y complejidad.', Maximino-Y ahora todos... Toň a-en las manos de todos... polo-vamos a oír latir... 139 TONA—larga mentě... ^ MAXlMlNO-el misterio... iM-FRMEDiAWA-de nuestros propios coiaames- tSiguen * tianza, la cadena. La luz haido aunientando progresiva-„cnttLo a landos. busta alcanzar la mtonU, mtensidad, T ELÓN